DE TODA LA VIDA
Las herramientas
La relajación
Entre manos expertas
Los primeros asientos hidráulicos
Los afeites
Juego de espejos
Tranquilidad
Corte
Brocha
Tomar asiento
Cerrar los ojos
Y escuchar la tijera como un mantra
Princesa por Princesa
En la Peluquería de Caballeros Luis Martín de Madrid.
Un lugar que siempre observo cuando paso y que por fin ayer franqueé para vivirlo por un rato desde dentro. Al otro lado del cristal, todo funciona con la exactitud de un reloj de cuerda de hace cien años. Los que tiene casi este negocio. Nació en 1925 pero resiste bien al siglo XXI.
Un placer charlar con peluqueros de siempre y hacer estas fotos.
Mañana, alguna más con detalles que me cautivaron...
TAN hoy y tan ayer...
ResponderEliminarHas recogido muy bien el espíritu de estos lugares. Algunos de los recuerdos más cálidos de mi infancia y adolescencia proceden de un lugar así, con mi peluquero Ramiro. Y también alguno de los recuerdos más ardientes: en la sala de espera se amontonaban revistas como Interviu, que para un pipiolo como yo y en aquellos años eran una puerta (qué digo, ¡una ventana!) a nuevas experiencias...
ResponderEliminarUn beso
Es algo magico y tierno
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